Un fondo británico con planes de venta controla la cadena de perfumería Douglas, que quiere ejecutar unos 60 despidos en Cantabria

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Si hay despidos, detrás hay un fondo. Empieza a ser una máxima, si bien en realidad lo que comienza a ser una máxima es que si hay un sector de la economía a lo grande, detrás hay un fondo. Normalmente, estadounidense. En este caso, británico. De los ganadores de la -anterior- crisis mirando a los perdedores, los países del Sur de Europa.

El caso de esta semana es el de la cadena de perfumerías Douglas, un gigante del sector forjado a través de adquisiciones y adquisiciones, que quiere ejecutar 59 despidos y cerrar 7 de sus 8 tiendas en Cantabria, dejando sólo la de Castro Urdiales, en un sector además fuertemente feminizado. En toda España el ERE, contra el que habrá protestas este viernes 18, alcanza las mil personas.

En el principio, según distintas informaciones de prensa especializada y económica recopiladas por EL FARADIO, era una empresa alemana fundada por la familia Kreke. La empresa Douglas nació en 1821 como una fábrica de jabones en Hamburgo. Su expansión fue importante al contar con  líneas de negocio que iban desde la perfumería y cosmética a las librerías, joyerías o moda (a través de AppelrathCuepper) y la cadena Hussel.

En 2012 fue adquirido por Advent, un fondo estadounidense , junto a la propia familia fundadora, en una operación estimada en 1.500 millones de euros.

Nada en este nuevo mundo de los fondos es fácil: realmente es Beauty Holding Tree, una empresa con sede en Hamburgo que controla el citado fondo Advent y a través de la que se produjo esa entrada en Douglas.

Y luego llegó el fondo británico CVC Capital Partners, que adquirió la compañía alemana en 2015 en una operación estimada en 3.000 millones de euros –el doble de la anterior venta, realizada tres años antes–, quedando la familia fundadora con apenas un 15% del conjunto del grupo.

En 2017, año en que encadenó pérdidas. seguía creciendo al hacerse en España -donde ya tenía integrado referencias como Juteco- con BodyBell (220 tiendas) y la cadena de tiendas de perfumería If (un centenar de establecimientos, propiedad a su vez de Eroski y con alta implantación en la zona norte del país), esto es, a sumar una facturación conjunta de 300 millones de euros y un total de 2.500 trabajadores sumando esas nuevas adquisiciones.

Tras la compra, Bodybell despidió a más de 200 personas y cerró  60 tiendas.

Ya en 2018 se produjo una tanda de despidos: anunció el cierre de medio centenar de tiendas y el despido de más de 200 trabajadores, casi el 20% de su plantilla .

Simultáneamente al crecimiento en España, adquirió dos cadenas de perfumería líderes en Italia, lo que sumado a que ya tenía la francesa Nocibe o compras de marcas daneses, entre otros, le convertía también en un gigante europeo presente en una veintena de países con más de 2.000 perfumerías y cerca de 20.000 empleados.

En 2020,  una vez superada la etapa de pérdidas e intentando unificar marcas y apostar por la venta online, el fondo CVC ya planeaba o sacar a bolsa otra vez o vender Douglas, para lo que contaba con apoyarse en el banco de inversión Goldman Sachs. En cualquier caso, todo el proceso ha supuesto la desaparición de 200 tiendas de Douglas.

EL FONDO CVC

El rastro de los fondos es difícil de seguir porque sus intereses son muy cambiantes.

En este caso se ha hecho más popular porque en España ha llegado hasta la Liga de fútbol.

Con sedes en Londres y Luxemburgo, CVC nació en realidad en los años 60 como una filial europea para capital riesgo del grupo financiero estadounidense Citicorp que sus directivos acabaron escindiendo en los 80 en un proceso en varias fases, creando esta nueva empresa y desarrollando sus propios y nuevos fondos.

A nivel global,  con una presencia fuerte en Estados Unidos, Europa o Asia, tiene o ha tenido –pues todo es muy cambiante intereses y presencia en el referente de la seguridad informática Avast, la firma de consultoría Alix Partners, Samsonite, Seat en Italia, el operador de servicios postales belga BPOST, entre muchos otros.

En agosto de 2021 se conoció su incursión en el mundo de fútbol, que seguía a la de otros deportes como la Fórmula 1 o el rugby –como el Campeonato Seis Naciones—. El acuerdo suponía que el fondo entraba con un 10% en la Liga –2.100 millones de euros—

No es su único interés en España, además de la propia cadena Douglas: tiene participación en Naturgy (antes Gas Natural) o CLH (hidrocarburos), en Cortefiel o en la cadena de residencias Vitalia.

En 2014 se hizo con el control de la empresa que sucedió a la antigua Cuétara, en un rescate en el que participó junto a cajas de ahorro y Banco Santander, que previamente habían emitido preferentes desde la empresa.

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