La tránsfuga Marta García –de ser elegida en las listas de Ciudadanos a mantener el escaño tras primero abandonar el partido y luego ser expulsada del grupo—había pronosticado un pacto en el que los representantes de verdad de Ciudadanos habrían pactado el mantenimiento de Diego Marañón en la Mesa del Parlamento –órgano de dirección de la Cámara del que Marañón se caía la semana pasada al desaparecer el grupo parlamentario naranja tras la expulsión de la parlamentaria no adscrita– y de las condiciones de Félix García como diputado.

Este lunes el Pleno votaba la nueva composición de la Mesa del Parlamento, a la que Marañón volvió a presentar su candidatura, que se vota, y obtuvo 31 votos de los 35 que hay en liza en el Parlamento, como secretario segundo de la Mesa.

Ha sido una votación secreta en una sesión con no todos los diputados asistentes, pero dado que Cristóbal Palacio también se postulaba y se habrá votado a sí mismo junto con su compañero de partido, parece lógico deducir de los 4 votos no recibidos entre los que no le han apoyado están los dos de Vox, y García, que tampoco ha votado.

Es prácticamente, todo el arco parlamentario cántabro, menos Vox y la propia García, de modo que para que fuera cierta la teoría de la conspiración del pacto con el PRC esto implicaría que los regionalistas hubieran conseguido arrastrar no sólo al PSOE sino incluso a la oposición del PP que lleva toda la legislatura cargando contra Revilla por su “sumisión” al PSOE y al Gobierno central en numerosas cuestiones, entre ellas las ganaderas y lo relacionado con el lobo.

Incluso aunque el PRC y el PP tuvieran un pacto en lugar de, junto al PSOE, una coincidencia en mantener el status quo de la Mesa y en evitar más perjuicios por el transfuguismo, sigue sin cumplir el pronóstico del pacto exclusivo con el PRC para eliminar la voz de la parlamentaria teóricamente más crítica con las políticas de Ganadería –teoría que obvia que el PP también tiene un parlamentario del sector, Pedro Gómez, que viene de la dirección de la patronal ganadera ASAJA–.

La otra pata de la predicción, que Alvárez mantenga condiciones equiparables a la de portavoz, parece más difícil todavía de cumplirse: ahora recala, junto a Marañón, en el Grupo Mixto, donde tendrán que repartirse tiempo, personal y recursos con quien ya está, los otros dos diputados, de Vox. Salvo que quien viene ejerciendo de portavoz de ese grupo renuncie totalmente en favor de Alvárez –la votación de la mesa demuestra que no parece haber mucha conexión-, en todo caso, y siempre y cuando todo suceda de forma pacífica e inmediata, lo que sucedería es que compartan portavocía. Y la mitad no es un entero.

Lo que sí se va a cumplir es que Marta García son las consecuencias de las normas contra el transfuguismo en el Parlamento de Cantabria al pasar a No Adscritos .

A No Adscritos, y no a independiente, figura que invocaba la parlamentaria expulsada de Ciudadanos y que directamente no existe en la tradición política estatal ni cántabra: la única figura equiparable a los independientes es dentro de los partidos, sin militancia, pero acabarían adscritos a un grupo. No hay posibilidad de acceder al Parlamento como independiente de un grupo: para ser algo parecido, hay que o abandonar el grupo o ser expulsado. Ambas situaciones te convierten en tránsfuga.

El órgano recordaba que, en base al reglamento de la Cámara, a partir de ahora :

-Sólo tendrá las condiciones de diputada rasa, sin lo que supone un grupo (recursos, personal administrativo o de comunicación que ayuda en la elaboración de discursos o trámites parlamentarios como registrar mociones…)

-No podrá estar en cualquier otro espacio al que se llegue en representación de un grupo

-Sus intervenciones en el debate de leyes serán una tercera parte inferior a las de un miembro de un Grupo Parlamentario

-Y sólo podrá intervenir en aquellas iniciativas que presente, no en turnos para opinar sobre las que presenten los demás, –de forma que, en general, tendrá menos voz, lo que hace que tampoco cuadre con su autoproclamada representación como «voz del campo», prácticamente única en el Parlamento–

-No podrá intervenir en debates como el de Orientación Política (conocido como Debate sobre el Estado de la Comunidad)

Sí que podrá estar en comisiones –la versión reducida y temática del Parlamento, que tramita muchos pasos previos al Pleno o leyes, y que reproduce las mayorías, además de requerir una especialización temática que hace que los parlamentarios se las distribuyen, mientras que García viene manteniendo especialidad sólo en Medio Rural y Servicios Sociales–, y también interpelar o preguntar al presidente o miembros del Gobierno (sólo una por cada opción en cada sesión), además de formular preguntas escritas.