Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) ha señalado hoy que permanecerá vigilante para que en la sanidad cántabra no haya ni profesionales ni pacientes de primera y segunda categoría. El sindicato se ha pronunciado así tras la comparecencia del consejero de Salud del Gobierno de Cantabria, César Pascual, retractándose de la polémica desatada hace unos días cuando aseguró que el copago era una solución para reducir las listas de espera.

El sindicato ha considerado importante la rectificación de las palabras del consejero pero ha insistido en que hay mucho camino por recorrer para aliviar la situación de la sanidad de Cantabria y para reducir las listas de espera y que la solución debe cimentarse en dar respuesta a preguntas como por qué se generan y quién controla esas listas de espera.

Rosa Mantecón, secretaria general de CCOO de Cantabria, ha recordado al consejero que es «fundamental que cuente con las organizaciones sindicales para hacer una planificación estratégica seria y rigurosa y que la representación de los trabajadores y trabajadoras tiene que conocer». En este sentido, Mantecón ha lamentado que aún no se haya reunido con los responsables de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO en Cantabria, el sindicato mayoritario en el Servicio Cántabro de Salud (SCS).

El sindicato ha estimado que la única forma de ordenar los recursos materiales y humanos para ofrecer una asistencia sanitaria de calidad para la ciudadanía es a través de la colaboración y cooperación entre todos, negociando qué aspectos se pueden mejorar para reducir las listas de espera.

CCOO insiste en que la buena gestión pasa por priorizar y ordenar mejor las listas de espera pero este es un trabajo que deben hacer a través de la negociación y el diálogo pues el sindicato tiene propuestas muy bien definidas que permitirían hacer más eficiente y versátil el sistema y que, además, crearían empleo de calidad.