Elena Fernández Otí y Eugenio Cordero son suegra y yerno. Ella sobrevivió a los bombardeos que sufrió el Barrio Obrero del Rey de Santander durante la Guerra Civil. El 27 de diciembre de 1936 perdió a su hermana María Ángeles en una de esas operaciones de la aviación alemana, colaboradora del bando nacional, sobre Santander. Él es profesor de Historia, y subray que «ha costado tres años» que llegase al Pleno del Ayuntamiento de Santander una moción para que haya un reconocimiento a esas víctimas de los bombardeos.

Ambos han concedido una entrevista a EL FARADIO DE LA MAÑANA, en Arco FM. Sobrecoge ver a Elena, con 97 años, cuando han pasado 87 desde aquel fatídico día, recordar con lágrimas en los ojos el horror que contempló en aquellos días y cómo su padre acabó encontrando a su pequeña Ángeles, de tan sólo nueve años, muerta en el Hospital de Valdecilla.

La memoria de Elena no se despista cuando piensa en el ruido de los aviones. Incorporó tan profundamente su sonido, que los oía antes incluso de que sonasen las sirenas en la ciudad. «Cada vez que oía los aviones me escondía debajo de la cama», cuenta.

También relata que la aparición de la aviación solía ser siempre a la misma hora, y reconoce que «no lo podía soportar». A veces ese ruido la pillaba en la calle, haciendo algún recado como llevarle comida a sus padres, y entonces eran los zarzales los cobijos que elegía para intentar evitar que una de esas bombas le tocase a ella.

Eugenio cree que este tipo de cosas no deben quedar en el olvido. Son cosas que están documentadas, aunque se las haya enterrado durante décadas. Y por eso pide, junto a otros familiares de víctimas y a la Asociación Héroes de la República y de la Libertad, que se ponga un monolito que recuerde a todas las víctimas de esos bombardeos, sin excepción, recordando que ahí no muere sólo gente de familia pobre o sólo personas de una ideología concreta.

Este jueves, PSOE e Izquierda Unida-Podemos llevan una moción al Pleno ordinario del Ayuntamiento para tener este gesto con las víctimas, recogiendo precisamente los intentos que han llegado de las familias o de aquella asociación para que esto se llevase a cabo, pero que no han tenido éxito hasta ahora.