Los años pasan y la situación, precaria, de los trabajadores del SEMCA no termina de solucionarse. Al contrario, empeora. Si el servicio no se cuida, denuncia Josué Castillo en una entrevista concedida a EL FARADIO, sucede que se llega al cierre de parques de bomberos porque no hay personal suficiente para cubrir las guardias mínimas, que deben componerse de cuatro bomberos.

Castillo es el presidente del Comité de Empresa del SEMCA. Explica que este servicio engloba seis parques de bomberos, Los Corrales de Buelna, Reinosa, Valdáliga, Laredo, Tama y Villacarriedo, y aparte de eso está la sala del 112, que es desde donde se coordinan todas las emergencias de Cantabria, «nos coordinan tanto a nosotros como al resto de servicios, Guardia Civil, Policía, otros bomberos municipales, desde ahí lo gestionan todo».

Están tratando de negociar un nuevo convenio colectivo con el Gobierno de Cantabria, puesto que el actual lleva caducado desde 2013. Afirma que han tratado de renovarlo con los Gobiernos anteriores también, pero no lo han conseguido. Y advierte de que las intenciones suelen ser buenas, pero si se dejan estas cosas para la parte final de una legislatura, puede ocurrir que haya un acuerdo y que eso se exponga como un éxito del ejecutivo, o que no lo haya y el tiempo se agote.

De momento, esto es lo que está sucediendo en la legislatura actual. En la primera reunión, el actual Gobierno reconocía que era ya el momento de llegar a un acuerdo, «hemos ido avanzando bastante con la mayoría de los artículos, parecía que quedaba ahí solo algún fleco, incluso ya pensábamos todos que lo íbamos a firmar», pero «ya hace unos meses que dejaron unilateralmente de sentarse con nosotros», cuenta. Creían que se iba a reactivar la negociación y que acudiría Isabel Urrutia, la propia consejera de Presidencia, «nos emplazaron al día 25 de noviembre, justo el día después del tema este de los Presupuestos», pero se acabó anulando la reunión. Según Castillo, por la falta de Presupuestos, «fue la excusa que se buscaron ahí y nada, ahí ya nos dieron un cerrojazo, no se han vuelto a sentar con nosotros».

Este miembro de UGT refleja que la falta de Presupuestos «no tiene nada que ver» con la negociación de un convenio colectivo, pero eso es lo que se han encontrado. Por eso decidieron hacer una asamblea de trabajadores para hablar de qué podían hacer. Tomaron la decisión de dejar de hacer horas extras, lo que hace cojear ostensiblemente al servicio, porque la plantilla, dice, es insuficiente. «No tienen personal, las oposiciones que tienen abiertas no las terminan, llevan sin meter gente no sé cuánto, las bolsas que tienen las tienen agotadas, y entonces en el momento que hemos dejado de hacer las horas pues se ha montado el caos que se ha montado». Y añade, por si todo esto fuera poco, que esas horas extra «no se están pagando».

Esto lleva al cierre de parques de bomberos, algo que Castillo no había visto en los casi 20 años que lleva trabajando en el SEMCA. «Me parece una cosa gravísima», que además cuenta con sentencia judicial del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria en contra del Gobierno, pero el presidente del Comité de Empresa dice que no se está cumpliendo y ya han llegado a pedir ejecución de esa sentencia para que se cumpla con los mínimos de personal exigible, el de cuatro bomberos en cada parque por guardia.

«El Parque de Los Corrales ha estado cuatro días seguidos cerrado. Bueno pues han tenido la suerte de que no ha habido un accidente en algún túnel, un incendio gordo…», porque si sucede algo grave en un sitio que no tenga un parque de bomberos cerca, pues el tiempo de respuesta será mucho mayor. «Hay cosas que no son tan urgentes y hay cosas en las que la vida de una persona depende de que tú llegues un poco antes o un poco después», subraya Castillo.

Aquí la conversación es sobre un servicio público que está menguando y eso puede tener consecuencias graves. El presidente del Comité de Empresa habla de una buena voluntad por parte de los trabajadores, pero ya no quieren seguir por un camino que lleva a un empeoramiento de sus condiciones laborales y esperan una reflexión por parte del Gobierno para terminar con una situación anómala, como la de tener un convenio caducado durante 12 años.