El pasado 23 de septiembre la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional dictó sentencia en contra de Liberbank en el litigio que mantenía desde 2013 con los sindicatos representantes de sus empleados.

Según la sentencia, consultada por EL FARADIO, la entidad financiera, que ha recurrido ante el Tribunal Supremo, ocultó los datos de sus condiciones económicas del primer trimestre de 2013 a los sindicatos durante las negociaciones de las modificaciones laborales que había impuesto.

Afectados por las preferentes de Liberbank se manifiestan contra el banco.

Además, Liberbank retrasó dichas negociaciones para acogerse al Acuerdo con la Comisión Europea de reestructuración, e imponer unas medidas aún más duras de las que había planteado en primer momento ante los sindicatos.

La entidad trasladó a sus empleados que estas condiciones eran una imposición de Bruselas dentro de la “limpieza” del ladrillo de los balances de la banca que se iba a llevar a cabo de forma imperativa a través de los llamados “decretos Guindos”.

Sin embargo, se ha estimado la denuncia planteada por los sindicatos CSI, CSICA y STC para que se declaren nulas las condiciones; las cuales incluían reducción salarial, supresión de beneficios sociales y suspensión de aportación a los planes de pensiones; así como suspensión de contrato y reducción de jornada a más de 1.670 trabajadores.

EL BANCO ASEGURA QUE OCULTÓ LOS BENEFICIOS POR SUS NEGOCIACIONES DE SALIDA A BOLSA

Estas condiciones que se impusieron en el ERTE de 2013, según dicta la sentencia, se hicieron sin proporcionar la documentación necesaria sobre la última hora de las condiciones financieras de la empresa.

Y es que Liberbank se acogió a sus resultados negativos (pérdidas) de 1.715 millones de euros, más los 448 millones de pérdidas de Caja Castilla-La Mancha que tuvo durante el periodo de 2012.

Sin embargo, la entidad ocultó interesadamente a la representación sindical los resultados del primer trimestre de 2013, que mostraban unos beneficios ya de más de 33 millones de euros.

En una reunión con los sindicatos, representantes de la empresa adujeron las pérdidas de tres meses atrás, pero ese mismo día entregaron los datos positivos en una nota a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Por ese motivo la sentencia no estima que “no se hubiese confeccionado” dicha documentación, sino que “no se quiso entregar, y con ello no se pudo llevar a cabo el periodo de consultas en los términos exigidos legalmente”.

Liberbank alegó que se reservó el derecho de preservar la información debido a que la empresa se encontraba pendiente de admisión a cotización en Bolsa, que comenzó a cursarse al día siguiente. Sin embargo, la sentencia considera que las negociaciones podrían haberse retrasado hasta poder contar con la información completa.

Por ello ha ordenado que se reponga a los trabajadores a la situación previa a la aplicación de estas medidas impuestas en junio de 2013 de forma unilateral por el banco que dirige Manuel Menéndez. Dichas medidas fueron sustituidas por el acuerdo de diciembre del mismo año con los sindicatos mayoritarios (CCOO y UGT) y que fue anulado por los tribunales al vulnerar el derecho de negociación de algunos sindicatos minoritarios.

Liberbank ha anunciado que recurrirá ante el Supremo esta sentencia.

EL RESCATE Y NEGOCIO DE LA BANCA

Sede de Liberbank en Madrid, junto al Congreso de los Diputados.

Liberbank es el banco privado en el que se integra la antigua Caja Cantabria, que fue intervenida por el Banco de España y vendida a Caja Astur, socio mayoritario de Liberbank, y que nació con un agujero de 2.000 millones de euros.

Además de conservar vicios de los años de la burbuja, la banca está adquiriendo otros nuevos como la elaboración de los préstamos universitarios, unas ofertas que están aumentando considerablemente en los últimos años.

En el caso de Liberbank, sus préstamos están condicionados a algunas cuestiones como la domiciliación de la nómina de alguno de los avalistas, así como de varios recibos domésticos, la creación de una tarjeta de crédito con gasto mínimo al año o la firma de un plan de pensiones.

Además, en los últimos años han ido surgiendo sentencias contra el banco por su participación en la venta de preferentes; y la Comisión Nacional del Mercado de Valores ha impuesto este año una multa de 1,5 millones de euros al banco por infracciones muy graves en operaciones relacionadas con participaciones preferentes y deuda subordinada. De estos, 750.000 corresponden a multas a Caja Cantabria.

Recientemente, Liberbank ha puesto a la venta su sede en Madrid, que se encuentra en la Carrera de San Jerónimo, junto al Congreso de los Diputados, según informaba recientemente El Confidencial. Este edificio tiene un valor de 13 millones de euros y se heredó de la antigua Caja Castilla-La Mancha (que integra Liberbank junto a Caja Astur y Caja Cantabria).

Liberbank ya ha reconocido recientemente que su prioridad ahora es vender todos sus activos improductivos –como este edificio o dejar de gastar en alquileres–, porque a finales de año se termina el fondo que le concedió el Estado para cubrirse de las pérdidas potenciales por la caja de Castilla La Mancha.

Esta semana, representantes del banco en Cantabria se han reunido con el consejero de Vivienda del Gobierno de Cantabria, José María Mazón, para comprometerse a negociar los casos de familias vulnerables cuya residencia habitual peligre.

Sin embargo, la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) ha denunciado en multitud de ocasiones que el banco es de los más reacios a llegar a acuerdos con los clientes afectados por la crisis. De hecho, los escraches que la plataforma ha llevado a cabo en sus oficinas han traído consigo las primeras multas por la Ley Mordaza en Cantabria.