CNSV organiza una ruta en la costa de Ajo, una zona que “tiene enorme valor por sí misma”
El colectivo Cantabria No Se Vende organiza una nueva ruta tras el levantamiento del Estado de Alarma, el sábado 27 de junio de 10 de la mañana a 18 de la tarde. Esta ruta discurrirá entorno a la costa de Ajo, que como CNSV indica “tiene enorme valor por sí misma”, frente a lo que están declarando los mismos políticos “que pretenden seguir hormigonándola e interviniéndola sin consultar al pueblo”.
🔦Pretende @cantabriaES @Prcantabria @RevillaMiguelA hacer esto con el Faro de Ajo, el punto más septentrional de Cantabria. Pero los faros ya emiten luz para cumplir su función, no viene a cuento esta intervención.
¿Cuál preferís vosotr@s? pic.twitter.com/uf5BRd3HA0
— Cantabria No Se Vende 💢✊🏼♀️🌱 (@_CNSV_) May 28, 2020
Recorrerán el punto más septentrional de Cantabria, disfrutando de su paisaje, su paisanaje, su economía tradicional, su fauna y flora autóctonas, su arquitectura tradicional, o sus formaciones geomórficas entre muchas otras características.
Para facilitar la organización debido a las necesarias medidas de seguridad y aforo limitado será necesario confirmar la asistencia en cnsv@cantabrianosevende.org. Los asistentes deberán llevar mascarilla para cuando no sea posible mantener la distancia de seguridad, calzado cómodo, algo de comida, agua, pueden llevar bañador y, si tienen, unos prismáticos, porque recorrerán una zona de alto valor ornitológico, desde la que también se divisan algunos cetáceos en invierno.
La ruta comenzará a las 10 de la mañana, en la Iglesia de Bareyo como punto de encuentro. Tras visitar la iglesia comenzarán la ruta de 10 km (unas 5 horas aproximadamente) para valorar la costa de Ajo.
«LO MEJOR ES CONSERVAR SU ENCANTO NATURAL»
Cantabria No Se Vende se ha mostrado en contra de la intervención de Okuda en el Faro de Ajo, junto con otros colectivos como DEBA, Concejo Abierto de Santander, Grupo Alceda, que lo consideran como una falta de respeto al propio edificio del faro, su uso y su entorno y paisaje, o Izquierda Unida, que señala una posible prevaricación en el proyecto.
En concreto, CNSV considera que este proyecto para pintar el faro de Ajo con los colores y diseños de Okuda “no viene a cuento”, e indican que “si querían dotar de interés turístico la zona, lo mejor es conservar su encanto natural, evitando el horroroso pelotazo urbanístico de segundas residencias que ellos mismos propiciaron”.
El propio Diegu San Gabriel, co-portavoz de CNSV explicaba en la Cadena Ser que “este tipo de intervenciones sobre espacios de un gran valor patrimonial deberían decidirse de forma participada, ya que toman decisiones pensando en el turismo y no en las personas que vivimos y trabajamos aquí”.
“Están convirtiendo Cantabria en un parque temático, porque quienes vivimos en el entorno del faro de Ajo sabemos que está totalmente degradado con urbanizaciones para el turismo de segundas residencias” añadía Diegu.