Diego Blázquez, director general de Memoria Democrática: “No se trata de reabrir heridas, sino de cerrarlas”

El responsable nacional de Memoria Democrática dirige junto a Zoraida Hijosa, su homóloga en Cantabria, el seminario ‘Las políticas públicas de memoria democrática’
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Diego Blázquez, director general de Memoria Democrática del Gobierno de España, ha subrayado este martes que el propósito de la ley de memoria democrática no es “reabrir heridas, sino cerrarlas”, y que su aprobación busca contribuir a la divulgación sobre la “construcción de la democracia en España”.

Blázquez, quien junto a Zoraida Hijosa, directora general de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica del Gobierno de Cantabria, dirige el seminario de la UIMP ‘Las políticas públicas de memoria democrática’ ha incidido en declaración a los medios en que “los poderes públicos tienen la obligación de trasladar y facilitar conocimientos para superar la división básica que supone el ocultar, esconder o maquillar realidad”.

Por este motivo, el responsable de memoria democrática ha destacado que España, al igual que otros países con pasados complejos, debe abrir un debate sobre la Guerra Civil y el franquismo y abordarlo “con objetividad, con claridad y con honestidad”, ya que “aumentará la calidad democrática”.

Asimismo, Blázquez ha explicado que el curso se compone de un total de tres objetivos: situar la cuestión española desde una perspectiva internacional, tratar las principales herramientas relacionadas con el fomento de la memoria democrática y abordar el caso de España desde la óptica de la antropología forense.

“El contenido de este tipo de políticas se basa en cuatro principios: verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición”, ha explicado. En cuanto a su incorporación al apartado educativo, ha recordado que la memoria democrática “ya está en la nueva Ley de Educación como un contenido”. “Cada vez hay más debate y mayor sensibilidad por parte de la sociedad española”, ha añadido.

Por otro lado, el director también ha hecho una breve descripción estadística del Plan Estatal de Exhumaciones, aprobado el pasado abril por unanimidad y que contará con una dotación de tres millones de euros anuales durante los próximos cuatro años. El número total de proyectos presentados hasta ahora es de 600, pero Blázquez ha explicado que “no todos se podrán llevar a cabo” por problemas técnicos o de viabilidad.

En este sentido, el director del curso ha apuntado que Andalucía se sitúa como la comunidad autónoma con más fosas identificadas (cerca de 300), y ha destacado un proyecto de exhumación en la provincia de Córdoba como el de mayores dimensiones planteado hasta el momento. Se trata, ha explicado, de una fosa con más de 4.000 cuerpos cuyo desenterramiento está previsto que se prolongue durante los cuatro años de duración del Plan. “Lo importante, no obstante, es la voluntad de sacarlo adelante que hay”, ha alabado.

Por último, Blázquez ha recordado que las instituciones “debemos ponernos de acuerdo para poner en marcha políticas que vayan a lo esencial”, recordando que una de las fortalezas de la Constitución de 1978 reside en el pluralismo político.

SOBRE LA UIMP

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ZULOAGA ESPERA APROBAR LA LEY DE MEMORIA HISTÓRICA DE CANTABRIA ESTE AÑO

El vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, ha confiado en que la Ley de Memoria Histórica de Cantabria se apruebe antes de que acabe el año y esté “plenamente vigente” ya en 2022 con partidas incluidas en los presupuestos de la Comunidad Autónoma.

En la presentación del libro ‘La recuperación e identificación de los restos de Eloy Campillo’, que ha tenido lugar esta tarde en la Sala María Blanchard del Palacio de Festivales, ha explicado que el proyecto de ley avanzará en su tramitación a partir de septiembre, cuando se retome la actividad del Parlamento, y que, una vez superadas ya las enmiendas a la totalidad, está a expensas del debate de las enmiendas parciales y la posterior aprobación definitiva y publicación en el BOC.

Zuloaga ha defendido que el objetivo de la ley “no es rescribir la historia, sino volver a poner en la historia nombres que fueron borrados como los de Eloy y otros tantos y tantas que fueron silenciados” a través de una “hoja de ruta clara” en aspectos como la identificación de fosas, el seguimiento de las víctimas o el banco de ADN. Asimismo, ha señalado que es un texto que permite a la sociedad cántabra “avanzar en derechos” y desarrollar en nuestra Comunidad Autónoma la ley estatal de 2007.

En su opinión, resulta fundamental hacer “muchísima pedagogía” desde el Gobierno de Cantabria, las organizaciones de memoria histórica y, sobre todo, las familias para “reconocer la historia de nuestros antepasados”.

Visiblemente emocionado, ha recordado la mañana de finales de octubre de 2019, cuando en la torca Topinoria, en la zona oriental de los Picos de Europa, asistió a las labores de recuperación de los restos humanos del que fuera alcalde pedáneo de Sotres y guarda de Picos de Europa, Eloy Campillo, asesinado en 1945, que se encontraban en una sima a 180 metros de profundidad. Fue la primera vez que el Ejecutivo cántabro colaboró en un operativo de estas características.

El vicepresidente cántabro ha trasladado su agradecimiento a todos los que formaron parte del dispositivo y la importancia de homenajear la memoria de Eloy Campillo a través de esta publicación, motivo por el cual ha felicitado al coordinador de la obra, el antropólogo forense Fernando Serrulla, a quienes han participado en su elaboración.

Pablo Zuloaga ha estado acompañado en la presentación por el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez; las directoras generales de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica, Zoraida Hijosa, autora del prólogo; de Acción Cultural, Gema Agudo, y de Igualdad y Mujer, Consuelo Gutiérrez; el director general de Memoria Democrática del Gobierno de España, Diego Blázquez; Francisco Etxeberría, antropólogo forense y miembro de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, y el propio Fernando Serrulla.

También han asistido la directora del Instituto de Medicina Legal de Cantabria, Pilar Guillén; familiares de Eloy Campillo y representantes de asociaciones de memoria histórica de la Comunidad Autónoma, entre otros.

El libro, editado por el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, se enmarca dentro de la estrecha colaboración que la Dirección General de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica mantiene con la Secretaría de Estado de Memoria Histórica y supone el arranque de una serie de monografías que está previsto editar sobre ‘Memoria democrática. Fosas y exhumaciones’.

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