Piden al Gobierno de Cantabria los informes que avalen el efecto repoblador de la tauromaquia
La Fundación Franz Weber ha solicitado al Gobierno de Cantabria que aporte informes o estudios que justifiquen las ayudas públicas destinadas a eventos taurinos en pequeños municipios. La organización reclama datos objetivos que respalden la afirmación de que estas actividades contribuyen a la repoblación del medio rural, una idea que el propio Ejecutivo cántabro ha esgrimido como justificación de estas subvenciones.
Según la ONG, en 2024 el Gobierno autonómico puso en marcha por primera vez una línea de ayudas destinada a localidades con reto demográfico para cubrir hasta el 90% del coste de actividades como encierros, novilladas o corridas de toros. En total, se transfirieron cerca de 42.000 euros a cinco municipios.
La Fundación cuestiona la ausencia de documentación técnica que respalde esta medida, tanto en la convocatoria del año pasado como en la actual. A su juicio, tanto el Ejecutivo como el Consejo Asesor para la Lucha contra el Despoblamiento deberían haber dispuesto de informes previos que evaluasen el efecto de estas ayudas antes de concederlas.
En este sentido, la organización ecologista considera improbable que existan estudios detallados y advierte que los únicos datos disponibles podrían limitarse a cifras de asistencia a los festejos, algo que, a su entender, no demuestra ningún vínculo real con la repoblación del territorio.
Por su parte, el Gobierno de Cantabria ha defendido estas subvenciones alegando que permiten organizar festejos que “atraen visitantes a los pueblos”, según recogía una nota de prensa oficial. Este argumento representa, según los naturalistas, un cambio de criterio respecto a la finalidad original de las ayudas, vinculadas a la lucha contra la despoblación, y lo interpretan como una forma de justificar con dinero público la celebración de espectáculos polémicos en municipios pequeños.
La asistencia a corridas de toros en Cantabria desciende 80% en dos décadas
Además, el Ejecutivo ha sostenido que estas actividades dinamizan la economía y la vida social de las localidades. No obstante, desde la Fundación Franz Weber consideran que este tipo de eventos, por su carácter puntual, no pueden considerarse una estrategia eficaz de desarrollo rural. Recuerdan que ningún experto en demografía o lucha contra la despoblación avala la tauromaquia como fórmula de dinamización territorial.
En algunos casos, el apoyo económico a estas celebraciones ha experimentado incrementos de hasta un 1.200%, lo que ha suscitado nuevas críticas desde sectores que cuestionan la prioridad de estas partidas en el actual contexto presupuestario.
La petición de la Fundación se ampara en la Ley de Transparencia y Buen Gobierno, que otorga un plazo de 30 días al Gobierno autonómico para responder. La solicitud busca conocer en detalle los criterios de evaluación y seguimiento del impacto de las ayudas, así como el papel de los órganos asesores implicados.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Cantabria pierde población en casi la mitad de sus municipios, una tendencia que afecta especialmente a las zonas rurales del interior. Los informes del Ministerio para la Transición Ecológica señalan que el fenómeno del despoblamiento rural está vinculado a factores estructurales como la falta de servicios básicos, empleo estable o conectividad digital. En este marco, las políticas públicas de dinamización rural suelen centrarse en sectores como el agroalimentario, el turismo sostenible o la economía social, en lugar de actividades culturales con carácter puntual.
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