Sin cargo ni conciencia

Iñaki Vía es portavoz del colectivo Derecho Subjetivo
Tiempo de lectura: 4 min

La verdad es que ya no sorprende.
Nos hemos acostumbrado tanto a los auténticos disparates de los dirigentes políticos de la ultraderecha, que casi echamos de menos el día que no dicen una estupidez.

Es como si por cualquier motivo, un estado genocida se toma un día libre y no masacra a nadie.
No se le añora ( ojalá fuera cierto) pero se hace raro.
Más bien en lo que pensamos es en qué estará tramando.

Pues con la ultraderecha, tanto a nivel nacional como en Cantabria, pasa lo mismo.
Lo de nivel, entiéndase, es una forma de hablar.

No acabamos de digerir aún el texto del anteproyecto de Ley de Vivienda que pretenden para Cantabria, cuando resulta que la alcaldesa de Santander, la inefable Gema Igual, nos explica porqué, cómo y de qué manera se disponía a cumplir con el acuerdo del propio Ayuntamiento, de modificar el nombre del callejero eliminando el homenaje que significa conceder el nombre de una calle a alguien.
En este caso a gente que colaboró activamente con el franquismo, con su represión y con todo lo que significó aquel negro periodo de casi cuarenta años.

¿ Cómo pretendía cumplir?
Pues con tiempo. Sin prisas.
Los años pasados, a ella no le pasaban factura.
Supongo que ningún familiar suyo fue víctima de los homenajeados.
Textualmente declara » no había ningún plazo marcado, y no era mi prioridad.»
Y , seguidamente declara no tener ningún cargo de conciencia.

La verdad es que la creo.
Si algo hay que reconocer a los ultras, es su falta de conciencia y de rubor en reconocerlo.

Pero además, en este caso, está demostrado que a Gema muchas cosas le dan igual.

Ya sea que su atención a la emergencia habitacional haga aguas por todos lados y lleve a la desesperación y suicidio a sus vecinos.
Nada ha cambiado. Si se dan las mismas circunstancias, volverá a ocurrir.
No hay un plan.
No existe un protocolo frente a la emergencia habitacional.

Ya sea que muchos barrios sufran la gentrificación que provoca el alquiler de pisos para uso turístico.
Santander es su cortijo, y prefiere turistas que vecinos.

Preguntas de examen:
¿ Saben esos turistas, el riesgo que corren al respirar nuestra hermosa contaminación?

Les invito a consultar las estadísticas de enfermedad cancerígena y el ranking de honor que Santander ocupa.

¿ Saben esos turistas también, el riesgo que corren de encontrarse con una rata en sus paseos por una ciudad que es la antítesis de la limpieza?

Ya se lo digo yo. No lo saben.

Pero decía antes que yo la creo. Y no me queda otro remedio que hacerlo.
Porque no le importa que sus vecinos, sean humillados por vivir en una calle con el nombre de un miserable cura que ocultó la documentación de personas fusiladas , impidiendo así a sus familiares la localización de los restos.

Porque le traen sin cuidado los vecinos expulsados de su barrio, o aquellas que se suicidan presas de la desesperación.

Porque ni por un momento se plantea realizar un mapa de vivienda vacía , averiguando así a quién pertenece y porqué está vacía.

Porque no se plantea realizar un mapa de vivienda turística , logrando saber así el número exacto y cuál es legal y cuál no lo es.

En lugar de eso, propone un buzón en donde los vecinos echen denuncias de otros vecinos.
Práctica muy del estilo franquista, tan del agrado de la alcaldesa.

Y todo ello, sin cargo de conciencia.

Lo normal en estos casos.
Lo normal en un partido en el que aquél que dice ser el jefe, ése que no gobierna porque no quiere, declara a los cuatro vientos que las subidas del SMI sólo sirven para ocasionar un
» esfuerzo salarial a las empresas y recaudación de impuestos».

La verdad es que, después de éste panorama, si algún asalariado sigue pensando en volver a votar a personal así, debería comprobar si le llega suficiente sangre al cerebro.

Porque si algo tienen los ultras, sean quienes sean , tanto Aznar, Ayuso , Abascal, Igual, Trump etc , etc , es que no engañan.

Avisan de que te van a joder , y acaban jodiéndote.

Estamos avisados.

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