Las noticias siguen llegando desde la Franja de Gaza, pero mucho más a cuentagotas. Desde el acuerdo de alto el fuego, da la sensación, o se quiere dar la sensación de una mayor calma en la zona, pero lo que sucede es también una mayor ocultación, se desplaza el foco informativo.

Ángeles Cabria, activista de Cabezón por Gaza, cree que «somos todos conscientes de que esto es una absoluta farsa para continuar el genocidio. Ese genocidio del que ya Ilan Pape hace más de 20 años llamaba un genocidio en progreso. No ha sido un alto el fuego», dice en una entrevista concedida a EL FARADIO. Precisamente, este viernes, el director de este medio, Oscar Allende, estará en el Centro Social Smolny junto a Cabria y junto a un refugiado palestino y su hija, en una charla titulada ‘Hablemos de Palestina’.

Que la situación esté siendo conducida por Israel y Estados Unidos le genera la mayor de las desconfianzas, y ve más una intención de perpetuar el apartheid y que Israel avance en la ocupación de Cisjordania que una intención de calmar las cosas. Y con la connivencia de los países europeos. Y un acuerdo movido con rapidez para ver si servía para que Donald Trump consiguiera el Premio Nobel de la Paz.

«Ahora más que nunca tenemos que continuar hablando de Palestina y además siendo conscientes de lo que esto supone, esto va mucho más allá. Esto supone un problema que es universal», dice Cabria. En su opinión, lo que está sucediendo es un avance del fascismo de la mano del capitalismo. «La gran bestia, se ha tragado los derechos humanos y el derecho de un pueblo a la soberanía sobre su tierra, y esto es algo que nos afecta a todos», reflexiona.

Gobernantes y políticas de ultraderecha siguen avanzando y la activista estima que es «algo que nos debe de preocupar y que debemos de dialogar, que estamos en la resistencia y que esa resistencia la tenemos que construir. Esa resistencia es lo que estamos defendiendo del pueblo palestino». Porque todo pueblo tiene derecho a defender su soberanía y también a regresar a su tierra. Son derechos fundamentales.

Cabria piensa que «la ciudadanía, las comunidades, están con el derecho de Palestina, a su existencia y a su soberanía y a sus derechos humanos, y son los gobernantes quienes no dan la talla». Por eso cree que el movimiento que ha ido cogiendo fuerza no debe detenerse ahora, «tenemos que encargarnos de que se sepa todo lo que está pasando, porque está pasando muchísimo, porque no es que no esté pasando, es que no nos estamos enterando a través de los medios mainstream de comunicación, nos enteramos a través de las redes que manejamos de comunicación fuera de esto y sabemos la limpieza étnica que está habiendo en Cisjordania y sabemos que el nivel de ocupación israelí está aumentando».

Así pues, ve necesaria una resistencia que no puede tomarse ni un respiro, como sucede dentro de Gaza. Aunque se hayan visto gestos de varios países en las últimas semanas, no es suficiente. «La presión que se pone en los países obliga a que los gobiernos se tengan que manifestar de alguna manera, pero sabemos que es bastante falaz», advierte Cabria.

Sus palabras no desprenden optimismo, sino un realismo que cree que debe servir para seguir en la lucha por los derechos humanos. El año pasado se vio embarcada en el Handala, uno de los barcos que forman parte de la Flotilla de la Libertad rumbo a Gaza. Pero no es necesario subirse a un velero para defender al pueblo palestino. Para ella, el día a día del activismo en tierra también es una flotilla más.

Para finalizar, Cabria anuncia un nuevo Festival Cabezón por Gaza. El primero tuvo lugar en abril de 2024, cuando se cumplía medio año de la nueva fase de asedio y genocidio en Gaza. El 22 de noviembre tendrá lugar una segunda edición, en Cabezón de la Sal. «Queremos que sea tan exitoso como fue el otro, que vengan muchísimas personas a apoyar a Palestina.Habrá música, habrá poesía, habrá personas muy claves y muy interesantes que estarán allí con nosotras hablando y debatiendo y bueno estamos también con muchos temas y planes para continuar para que esto no cese, para que nuestra lucha no cese y estemos siempre ahí al lado del pueblo palestino», concluye.