La prolongación en el tiempo más allá de lo esperado de subcontratas a las que Trefilerías Quijano le ha encomendando tareas está impidiendo la incorporación a sus puestos de trabajo de una veintena de trabajadores fijos de esta emblemática fábrica de Los Corrales de Buelna.

En las últimas semanas, su Comité de Empresa está embarcado, con paros y movilizaciones, en una lucha contra la precariedad que se ha infiltrado en el sector que tradicionalmente se consideraba el más estable y con mejores condiciones, la industria.

De hecho, trabajadores y empresas mantenían un acuerdo que delimitaba el peso de la subcontratación y cuyo incumplimiento denuncia la parte sindical.

En concreto, según señalan los trabajadores, el acuerdo firmado con la empresa recogía la subcontratación de una sección de compactado, recuperar trabajadores que se encuentran trasladados a otra planta, y en concreto, la subcontratación de 7 puestos productivos y en caso de producirse un ERE, esos puestos volverían a ser ocupados por el personal propio de fábrica.

En declaraciones a EL FARADIO, el presidente del comité de empresa de la fábrica, Juan José Buenaga (UGT-FICA),  lamenta que lo que ha sucedido es que «esa subcontrata se ha ido alargando en el tiempo».

«No puede ser que, dentro de un año que queda de convenio, haya hipotéticamente unos despidos, y se quede la gente subcontratada en los puestos mientras el personal de Trefilerías se tenga que ir a la calle», advierte.

Además, añade que el número que deberían ocupar esos puestos que dejaría el personal subcontratado es de 22 trabajadores.

Por tanto, «se estaría incumpliendo la parte del acuerdo que recoge que en el momento de unos despidos, el personal de la propia fábrica ocuparía esos puestos» explica el miembro de UGT.

Este tipo de subcontrataciones es algo generalizado en el sector industrial cántabro, y Buenaga aporta los datos concretos: anteriormente contaban con «94 personas fijas y 4 a relevos», mientras que por la portería estaban entrando «182 personas, 36 ETT, y los demás eran personal de diferentes subcontratas.»

Actualmente, el número de trabajadores fijos ha aumentado gracias a la denuncia que ya pusieron a la Inspección de Trabajo, debido a que los contratos de ETT en la zona de compactado se encontraban en fraude de ley. Por otro lado, Buenaga explica que, aproximadamente hace diez días, han realizado «6 contratos fijos, con lo que en total ya son 103.»

Buenaga comenta también que «parece que las negociaciones están avanzando un poco más, y no tardaremos mucho en llegar a un acuerdo» pero concluye que «tienen que garantizar esos puestos de trabajo, si no, seguiremos con huelgas con un seguimiento prácticamente del 100%». De momento, el calendario de movilizaciones continúa tras varias convocatorias que han logrado parar la fábrica.

“La empresa sigue sin mover ficha y sin querer respetar los acuerdos de subcontratación, por lo que “si la empresa no rectifica, el conflicto está asegurado”, advierten.

EL SECTOR INDUSTRIAL EN CANTABRIA: POCO EMPLEO Y TEMPORAL

El sector industrial de Cantabria registra en 2019 (hasta el mes de mayo) su sexto año consecutivo como el de mayor tasa de contratación temporal de la comunidad autónoma y ya afecta al 20% de los asalariados.

La media de contratos temporales no ha bajado del 95% desde el año 2013, tres puntos más que la contabilizada en el mismo período en el sector servicios (92,8%) o dos más en comparación al total de la contratación (93,1%), según un informe elaborado por la Federación de Industria, Construcción y Agro (UGT-FICA) y difundido por UGT.

El informe de UGT-FICA relaciona estos seis años de creciente contratación temporal en la industria cántabra con las estadísticas oficiales de la Encuesta de Población Activa (EPA) en el mismo período, que confirman que en Cantabria el empleo industrial ha repuntado un 2,86% desde el año 2013 a 2018, con 1.058 ocupados más (de 37.049 a 38.107), más de la mitad de ellos (+534) autónomos o no asalariados.

Este incremento mencionado de menos de un 3% del empleo en la industria cántabra en el periodo coincidente con los años de recuperación económica, es cinco veces inferior a la media nacional, donde el sector industrial registra un aumento de 352.700 ocupados, casi un 15% más que al término de 2013 (de 2.355.500 a 2.708.200 ocupados).

EL GRUPO CELSA, EN MANOS DE FONDOS

Trefilerías pertenece al Grupo Celsa, de referencia en la industria en Cataluña. Recientemente, sus principales acreedores, los bancos BBVA, Bankia, CaixaBank y Sabadell, vendieron parte de su abultada deuda (1.425 millones) a ‘hedge funds’ o fondos oportunistas. La única entidad que aún no ha vendido su parte es el Banco Santander. Es decir, si el Grupo Celsa no recupera esa deuda, los fondos serán los propietarios de la mayoría de las acciones.

El Grupo Celsa es uno de los principales fabricantes de acero de todo el mundo y tiene en Cantabria emblemas como GSW (la antigua Nueva Montaña Quijano), Trefilerías Quijano (una histórica en Los Corrales), la división Trefilados Quijano o TICSA,  entre otros.