Las Peñicas, el fondo de Liberbank que está causando una intensa crisis de vivienda este otoño, desahuciará el próximo lunes 14 a María, una vecina de Carandía que hace siete años ya fue víctima de otro lanzamiento por parte del banco en el que se integra la antigua Caja Cantabria, además estando en ese momento embarazada.

La PAH advierte de que convocará STOP DESAHUCIOS, una acción para tratar de frenar el lanzamiento.

Es el de María un desahucio que no cumple muchos tópicos y que a la vez resume muy bien las sucesivas crisis de vivienda que se vienen produciendo en los últimos años: es un alquiler que Las Peñicas da por acabado pese a que los pagos estaban al día.

Hace siete años, eran autónomos, ligados a la construcción, proveedores de empresas de este sector, hasta que llegó la crisis y los problemas económicos.

Afrontaron, con toda la tensión que ello implica, su primer desahucio, que llegó cuando María estaba embarazada. Después Liberbank les ofrecería vivir en su propio domicilio de alquiler, en una solución que se planteó para más afectados. Los alquileres fueron cambiando de titular: luego fue Beyos y Ponga y ahora Las Peñicas, un fondo al que Liberbank ha derivado sus activos inmobiliarios y que ha decidido no prorrogar los contratos, independientemente de que se esté al corriente de pago o no.

En un comunicado, la PAH critica el «entramado indescifrable» que caracteriza a entidades como Las Peñicas, gestionada por administradores de forma simultánea a decenas de sociedades con las que comparten domicilio social, en este caso en Madrid.

También califican de «inadmisible» la «dejadez» de los servicios públicos municipales, y llaman a las instituciones a actuar, en concreto al Ayuntamiento de Piélagos y a la Oficina de Emergencia Habitacional del Gobierno de Cantabria. Asimismo, piden la implicación del presidente Revilla y recuerdan la urgencia de una Ley de Vivienda en Cantabria