El Barroquista es Miguel Ángel Cagigal. Gallego de apellido muy cántabro, y con un alias que nos lleva al arte del siglo XVII. Su especialidad es el patrimonio cultural y es lo que le hace famoso en las redes sociales. Twitter e Instagram son su fuerte, además de tener canales en Youtube.

Este jueves será uno de los participantes de ‘El arte de compartir’, un evento que mezcla la cultura y las redes sociales en un entorno tan apropiado como El Capricho de Gaudí de Comillas. Le acompañarán Sara Rubayo (La Gata Verde), Abraham Ramírez y Cipriano García-Hidalgo. Las entradas para el evento se han agotado ya, pero se podrá por streaming en directo en las cuentas de Facebook y Twitter de este singular monumento, y después se colgará el vídeo en su canal de Youtube.

El Barroquista pasó por los micrófonos de EL FARADIO DE LA MAÑANA, en Arco FM, para contar cómo resulta lo de compartir en las redes contenidos de este tipo, y cómo se puede crear una comunidad fiel en torno al patrimonio cultural. Y también aprovechamos para preguntarle por el Proyecto Pereda que tanto debate está generando en Santander y al que el Gobierno de Cantabria ha dado luz verde.

A El Barroquista le parece excelente que proyectos de este tipo generen ese debate. Cree que no debería haber, en general, tantas resistencias a que edificios históricos puedan sufrir modificaciones, pero también piensa que es una forma en que la ciudadanía demuestra estar preocupada por ese tipo de construcciones, y es una manera de tener un control y poner presión para que el proyecto en cuestión no termine siendo una aberración o que perjudique el entorno en el que se produce la obra.

«David Chipperfield suele ser un arquitecto que sabe lo que hace, en general», dijo acerca del autor del proyecto. Pero echa en falta que se expongan los argumentos bien, tanto si lo que se pretende hacer es bueno, como si es malo. Hacer un poco de pedagogía con los ciudadanos cree que es positivo, porque resulta más fácil valorar si una determinada obra merece la pena.