El pasado 12 de febrero, Pasaje Seguro Cantabria solicitó oficialmente sendas entrevistas con el presidente y vicepresidente del Gobierno de Cantabria y con la nueva delegada en Cantabria del Gobierno de España a las que hasta la fecha no han obtenido respuesta. El grupo ciudadano expresa su insatisfacción por la falta de respuesta.

Asimismo, denuncian que el presidente de la Autoridad Portuaria sigue sin ofrecer datos concretos sobre el número de intrusiones, o intentos de intrusión, en las cargas destinadas a Irlanda cuando se ha comprometido a ello.

En un comunicado, muestran “perplejidad ante el hecho de que, en dos meses de notas de prensa, casi nadie por parte de la Autoridad Portuaria ha indicado un asunto tan relevante como que la línea Cork-Santander estaba en un periodo de prueba y que no solo ha cambiado Santander por Bilbao, sino que también ha cambiado Cork por el nuevo puerto de Rosslare, más cercano a Dublín y al eje principal de actividad económica en Irlanda”.

Se trata, argumentan, de una nueva línea, Bilbao-Rosslare, porque Santander-Cork no ha tenido el éxito esperado. A juicio del colectivo: “No es muy digno criminalizar a los más débiles para explicar un fracaso comercial”. Asimismo, indican que apenas se ha reseñado en los medios que las personas que han merodeado por el puerto de Santander tenían como destino confeso Gran Bretaña, no Irlanda.

“Levantar un muro de hormigón de dimensiones colosales en entornos urbanos céntricos de la ciudad de Santander, va a situar al Puerto en otro nivel de agresividad, en este caso contra la mayoría de los ciudadanos locales, poniendo en cuestión la propia operatividad de los muelles cercanos a los distritos más poblados”, señalan desde Pasaje Seguro.