Iniciativa Cantabria Sostenible manifiesta su «sorpresa y decepción» por la ausencia de un proceso democrático de participación pública en la elaboración del actual Plan Regional de Ordenación del Territorio.

«Hay que recordar que en la pasada legislatura el Gobierno ya elaboró un documento sometido a un largo proceso de participación, que estaba lo suficientemente avanzado, como para haber sido llevado a la CROTU de fecha 31 de enero de 2018 para su aprobación inicial, con propuesta favorable de la Ponencia técnica y todos los informes sectoriales pertinentes», dicen en un comunicado, y por eso no encuentran explicación de las causas que han llevado a desistir del PROT realizado en la legislatura anterior y emprender la «innecesaria tarea de iniciar otro nuevo».

A diferencia del actual, el anterior borrador del PROT fue elaborado en un «innovador proceso» de participación social y ciudadana, pionero en Cantabria, que dio como resultado, estiman, el alcance de amplios consensos territoriales entre los más diversos sectores de la población de Cantabria.

«No entendemos los motivos reales que han llevado a contratar de nuevo a otro equipo, olvidando que es la administración pública la que contrata, y que el dinero público no es para dilapidarlo innecesariamente de esta manera, volviendo a realizar trabajos que ya existen», reflexionan desde esta iniciativa, que recoge el sentir de diversas asociaciones y partidos políticos de la Comunidad.

«Entendemos que con este nuevo PROT, se han ignorado las valiosas aportaciones hechas por la ciudadanía a lo largo de un año», recogidas en actos participativos en diferentes localidades de Cantabria.

Con problemas territoriales tan actuales como la implantación de polígonos eólicos o la nueva ley del suelo, creen que la actitud del Gobierno en la elaboración del actual borrador del PROT constituye un «sorprendente y atrevido retroceso democrático».

Por ello se preguntan qué política de intereses territoriales se ocultan tras el borrador actual del PROT, y manifiestan su «malestar y desconfianza sobre las verdaderas intenciones del Gobierno al proceder de esta manera», concluyen.