Desratizaciones y limpieza de fincas degradadas se comen casi la mitad del presupuesto de Salud del Ayuntamiento de Santander

Los solares abandonados en la ciudad se convierten en focos de suciedad, maleza o plantas invasoras
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El Ayuntamiento de Santander tiene previsto gastar en 2024 un total de 229.007 euros en conceptos ligados a la limpieza urbana y que llevan tiempo siendo objeto de críticas vecinales.

Se trata de conceptos como la desratización, limpieza y desinfección, que suponen hasta 179.207 euros, que aparecen en el proyecto de presupuestos, consultado por EL FARADIO.

O los 50.000 euros para la limpieza subsidiaria, es decir, la limpieza que asume el Ayuntamiento después de que no la hayan acometido los propietarios de fincas o zonas, a los que tendría que repercutirles después los costes.

Sumadas todas las partidas, las de desratización (que aparece varias veces) y la de la limpieza subsidiaria, ascienden a 229.007 euros.

En los últimos años, se han incrementado las críticas, en medios, redes sociales o según han trasladado vecinos a distintos grupos políticos, sobre ambas cuestiones: la profusión de ratas en la ciudad, más allá de las zonas más rurales en las que podía ser más propio, hasta detectarse en barrios del centro, de Tetuán a la calle del Sol pasando por el Pasaje de Peña; así como los solares vacíos o abandonados en los que se acumula suciedad o maleza, con el Cabildo de Arriba como principal exponente, pero con ejemplos por toda la ciudad, en barrios como el Prado San Roque o el Alta, entre otros.

Esas partidas aparecen reflejadas en las correspondientes al área de Salud, tal y como detalla el propio presupuesto.

Los propios informes municipales que acompañan a las cuentas públicas señalan que en el área de Salud, el presupuesto crece un 44% hasta alcanzar los 511.690 euros, y esos mismos documentos concretan que ese crecimiento se produce “en especial” por la dotación de un crédito específico para la ejecución subsidiaria de limpiezas de fincas y áreas que están siendo especialmente demandadas por los vecinos de Santander.

El crédito subsidiario es de 50.000 euros, y con los gastos de desratización suman 229.007 euros, prácticamente la mitad de los 511.690 euros de presupuesto del área de Salud.

En la liquidación de gastos del ejercicio de 2022 (con presupuesto prorrogado), se ve como se presupuestaron 135.646 euros en desratizar y 40.000 en limpieza subsidiaria; si bien finalmente la ejecución de estas partidas fue de 44.576 y el otro llegó a los 27.750.

LOS SOLARES ABANDONADOS

Si el estado de suciedad de la ciudad tras varios contratos de basuras encadenados con cifras a la baja, traducidos en menos personal o recogida, ha sido polémica recurrente –hasta llegar a los tribunales o a la petición de una Comisión de Investigación municipal, boicoteada desde el Grupo Popular en el Ayuntamiento-, otra de las muestras de la suciedad en Santander tiene que ver con los solares abandonados, focos de problemas de higiene urbana y en los que confluyen todo tipo de situaciones: desde propietarios desconocidos hasta.

La legislatura pasada se cerró con el inicio de los trabajos para un catálogo de solares vacíos, a cargo del anterior equipo de Urbanismo, en manos de Ciudadanos, si bien no trascendió ningún paso más –un aspecto que también estaba reflejado en el Modelo de Ciudad Santander Hábitat Futuro, concebido como un avance del nuevo Plan General hacia el que el PP siempre mostró distancia-. En los últimos días, el concejal de Izquierda Unida-Podemos, Keruin Martínez, reiteraba la necesidad de disponer de este registro. Formaciones como Cantabristas también se han referido a este problema.

En las pasadas municipales, de hecho, fue uno de los temas a los que aludieron los distintos candidatos: desde el regionalista Felipe Piña, que se mostró escandalizado por el estado de abandono de varios solares que visitó, hasta el socialista Daniel Fernández, cuyo partido lanzó propuestas como la recuperación de alguno de los solares del Cabildo como ubicación de un teatro municipal, instalación de la que carece Santander, llamado Sotileza, que evocaría el mítico Teatro Pereda y que serviría en este caso para revitalizar este céntrico barrio víctima de la degradación urbanística –hace más de una década murieron tres vecinos tras el desplome de un edificio en la calle Cuesta del Hospital-.

Aunque, como evidencian los distintos solares abandonados, no recurra a ellas, el Ayuntamiento dispone de fórmulas para actuar sobre los solares: sin ir más lejos, en marzo de 2023 usó para aparcamiento –gratuito en este caso, frente a la tendencia a las concesiones u OLA- en la calle Alta en una parcela cedida por propietarios que plantearon esta solución al no poder hacerse cargo de las tareas de limpieza y salubridad de la finca. La cesión se hizo bajo el régimen de comodato y sucedió después de que el Ayuntamiento abriera expediente de insalubridad sobre el solar por presentar en su interior varios turismos estacionados, algunos incluso abandonados, y vegetación silvestre de tamaño considerable, como matorral y maleza, incluso con ejemplares de la especie vegetal invasora de plumero de la pampa.

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